La oposición entre suníes y chiíes, motivo de risa en la televisión saudí

Fuente: Le Monde
publicado
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Durante el ramadán, la cadena MBC ha emitido una comedia, Selfie, que hace broma sobre los prejuicios religiosos de suníes y chiíes. Lo cuenta Benjamin Barthe, corresponsal de Le Monde en Beirut.

La primera temporada de Selfie, emitida el año pasado, hacía mofa del Estado Islámico presentando un personaje que se proclamaba califa y formaba una organización de brutos e ineptos. La segunda temporada parte de un motivo argumental conocido, que se presta tanto a la comedia como al drama: el intercambio, por error del hospital, de dos recién nacidos el mismo día. En este caso, el hijo de una familia chií es entregado a unos padres suníes, y viceversa. La confusión se descubre al cabo de veinticuatro años, y cada joven se va con sus padres auténticos.

Comienzan entonces las situaciones cómicas. Cada madre encuentra muy delgado a su verdadero hijo, y lamenta ruidosamente lo mal que al pobre chico le dieron de comer en la casa de la secta desviada. Los dos padres, preocupados por la pureza religiosa, se esfuerzan en reeducar a los jóvenes. El chií obliga a su hijo a peregrinar a los santuarios de Kerbala y Nayaf, y a celebrar la Ashura, la fiesta en que algunos chiitas se flagelan ostentosamente. El padre suní hace ayunar al suyo treinta días, además del ramadán, para expiar los años en que fue chií. Los chicos, que se ven a escondidas, dicen: “Nuestros padres están completamente locos”.

Selfie 2 es más útil que mil conferencias y artículos sobre el diálogo interconfesional”, ha dicho un miembro reformista del consejo real saudí. En cambio, escribas wahabitas han protestado contra la serie por burlarse de las tradiciones suníes.

Esta telenovela, con sus insólitas críticas al integrismo musulmán, puede ser signo de que algo se mueve en el reino wahabita. La cadena MBC, con sede en Dubái, es próxima al gobierno de Arabia Saudí. Nunca se ha hecho pública la lista de accionistas, pero el presidente, el jeque Ibrahim Al Waleed Bin Brahim, está emparentado con la familia real, y se cree que esta ha puesto la mayor parte del capital.

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