Francia endurece su legislación contra las sectas

publicado
DURACIÓN LECTURA: 2min.

¿Hay que hacer una legislación específica contra las sectas o perseguir sus posibles infracciones legales como las de cualquier otro grupo? Los diputados franceses han adoptado la primera solución, al aprobar una propuesta de ley que prevé la disolución de los grupos sectarios que han sido objeto de condenas penales y al instaurar un delito de «manipulación mental». Este último punto ha sido objeto de críticas, también por parte de las Iglesias.

La ley, que aún debe ser debatida en el Senado, prevé extender la responsabilidad penal a las personas morales y facilitar su disolución judicial en el caso de que hayan sido condenadas dos veces por infracciones penales.

El punto más delicado de la nueva legislación es la creación del delito de «manipulación mental», que queda definido como ejercer sobre una persona «presiones graves y reiteradas o la utilización de técnicas orientadas a alterar su razón para llevarla, de buen o mal grado, a un acto o a una abstención gravemente perjudicial para ella».

La creación de este nuevo delito ha sido criticada no solo por grupos considerados sectarios, como la Cienciología, sino también por las Iglesias, que ven ahí una amenaza contra la libertad religiosa. El portavoz del episcopado católico, el P. Stanislas Lalanne, estima que «el delito de manipulación mental es tan vago que se corre el riesgo de provocar desbordamientos incontrolados». Para el P. Jean Vernette, especialista en sectas, este nuevo delito «corre el riesgo de servir de cohete lanzador de una lucha antirreligiosa». El presidente de la Federación Protestante, el pastor Jean-Arnold de Clermont, ha calificado la propuesta de «peligrosa».

La Liga de los Derechos del Hombre estima que la legislación actual es suficiente para luchar contra las sectas, y ha mostrado sus reservas sobre el procedimiento de disolución judicial previsto, que, a su juicio, «no permite organizar la defensa».

Según Michel Tubiana, presidente de la Liga, el delito de manipulación mental presenta «serias dificultades de principio». Preferiría que se ampliara el artículo del Código Penal relativo al «abuso fraudulento del estado de ignorancia o de la situación de debilidad». Este artículo podría incluir las nociones de «presiones graves y reiteradas» y de «técnicas dirigidas a alterar el juicio», que figuran el el texto de la propuesta de ley.

Desde hace años se viene debatiendo en Francia la necesidad de una legislación anti-sectas. Actualmente, los actos delictivos cometidos en grupos sectarios son perseguidos como infracciones tradicionales (fraude fiscal, infracciones del derecho laboral, ejercicio ilegal de la medicina, estafa, agresiones sexuales…). De 280 procedimientos abiertos desde 1996, un centenar han sido archivados o han terminado en absolución, y 48 en condenas. La Iglesia de la Cienciología es la que ha sido objeto de más procedimientos judiciales.

El informe de una comisión parlamentaria sobre las sectas, dirigida por Alain Gest, en 1995, rechazó la idea de una legislación específica y de crear un delito de manipulación mental, estimando que el arsenal jurídico penal era ya suficiente. La proposición aprobada sigue el camino opuesto.

Contenido exclusivo para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.

Funcionalidad exclusiva para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta para poder comentar. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.