Una comedia familiar amable y animante, con su dosis de crítica social, protagonizada por un padre inasequible al desaliento, que hace todo lo que puede para sacar adelante a los suyos.
Convincente “thriller” con aire de cine negro en torno a una trama de abusos, engaños y silencios cómplices. El suspense es permanente, gracias a un ritmo bien medido y a un magistral uso de la elipsis.