Russell Balogh

Con más de lo mismo, pero muy bien contado y visualmente espectacular, ha resultado una vibrante película de aventuras.
Dos espías en la II Guerra Mundial que fingen ser un matrimonio: una buena historia, dos grandes actores para interpretarla, un director experimentado y un mal guion que la desaprovecha.
Una denuncia de la sexualidad despersonalizada que cae en la misma superficialidad que critica.

Contenido exclusivo para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.