En la tercera temporada, la serie sobre intrigas políticas protagonizada por Kevin Spacey continúa ahondando en el rebuscado cinismo que acaba haciéndola difícil de creer.
Haggis versiona con oficio una reciente película francesa sobre un hombre común que ve cómo su esposa es detenida, acusada de asesinato.
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios. Para aceptar las cookies pulse el botón de aceptación. Puede cambiar la configuración u obtener más información aquí.