Anamaria Marinca

Si estuviera mejor escrita, podría haber sido sobresaliente esta película bélica centrada en la tripulación de un carro de combate norteamericano en la II Guerra Mundial.
Con la historia de un antiguo pistolero unionista del Ulster sirve para que el magnífico guión ponga sobre el tapete muchas de las cuestiones que se plantean en el debate actual sobre el terrorismo.
Una película dura donde las haya, ingrata, áspera, incómoda y, sin embargo, de visión casi obligada, que muestra la realidad del aborto.

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