La protagonista abandona su país cuando estalla un conflicto bélico que rechaza totalmente. En el exilio, asediada por los recuerdos, busca encontrar su sitio para comenzar una nueva vida.
La autora narra el traslado en tren de 500 niños huérfanos en los años veinte del pasado siglo, cuando se produjo una terrible hambruna en la Rusia comunista.