Un director de cine reúne a las mujeres con las que ha trabajado durante su carrera para rodar una película que les rinda homenaje y que, de paso, sea un tributo al mundo del cine y a quienes visten a los artistas; los creadores de vestuario.
Es muy original –incluso extraña– la propuesta del cineasta turco nacionalizado en Italia. Y, como toda propuesta original, tendrá sus partidarios y sus detractores. Yo estoy en el primer grupo, aunque reconozco que la mezcla es arriesgada: por un lado, una película meta cinematográfica, con su jerga, sus referencias y los egos de los personajes; por otro, una potente trama alrededor de la moda y la importancia del vestuario, también con su propio lenguaje, y con un despliegue estético apabullante. Y a…
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