El octavo episodio de la saga lleva el aliento de la trilogía original, con una certera realización y unas interpretaciones que destacan la hondura de los personajes.
Tom Hooper dirige una notable adaptación del clásico musical inspirado en la obra de Victor Hugo, haciendo cantar a un reparto de grandes actores, entre los que destaca Anne Hathaway con una interpretación que le ha valido el Oscar.