Fritz Ford

Una de las cimas del cine negro, estrenada en 1953. Un sargento de la policía de Nueva York investiga el suicidio de uno de sus superiores. Una turbia trama de corrupción se va destapando.
En 1954, Wilder consolidó el reinado de Audrey Hepburn, que el año anterior había deslumbrado en Vacaciones en Roma. El arranque es memorable.

Contenido exclusivo para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.