El consejo escolar de Chicago aprobó el pasado 16 de noviembre la creación de una escuela pública para chicos negros. El objetivo es prestar una atención especial a esta parte del alumnado, que presenta un elevado índice de fracaso escolar.
La futura Urban Prep Charter Academy for Young Men es uno de los 100 centros del proyecto Renacimiento 2010, impulsado por el alcalde de Chicago, Richard Daley. Además de la Urban Prep, el año próximo se abrirán otros 15 centros del proyecto, entre ellos la primera escuela virtual de la red pública de la ciudad y un centro de secundaria promovido por la Universidad de Chicago. Todas tienen en común que son «charter schools», escuelas financiadas con fondos públicos, pero basadas en el modelo educativo que los creadores o los padres han decidido, y con amplia autonomía con respecto a la burocracia educativa.
El principal objetivo de la Urban Prep Charter Academy es, según sus directivos, atraer a alumnos negros y conseguir que muchos lleguen a la universidad. La necesidad es evidente, pues solo el 30% de los chicos negros obtienen el diploma de secundaria a los 18 años. Para Tim King, fundador de la escuela, una vía para facilitar que los chicos negros obtengan mejores resultados es la educación diferenciada. Su propuesta se basa en investigaciones recientes y en su propia experiencia. Antes de hacerse cargo del proyecto de la Urban Prep, King era el director de la Hale Franciscan High School, escuela católica del sur de Chicago que ha obtenido muy buenos resultados con chicos negros. Ahora King se ha propuesto trasladar la fórmula a la red pública de Chicago, porque -como declaró al «Chicago Tribune» (6-11-2005)- «muchas familias no pueden permitirse enviar a sus hijos a un sitio como Hales Franciscan», y «no parece justo que solo quien tenga dinero pueda enviar a su hijo a la escuela que mejor responde a sus necesidades».
El proyecto educativo de la Urban Prep Charter Academy prevé reforzar los planes de estudio en los puntos débiles de los chicos, como lengua y humanidades. Además, los alumnos pasarán un día por semana en una empresa, para facilitarles el posterior ingreso en el mercado laboral, y llevarán a cabo tareas sociales.
La Urban Prep era una de las diez propuestas que se presentaron para sustituir a una escuela, situada en una zona de mayoría negra, que tenía problemas crónicos de bajo rendimiento. La comunidad escolar se decidió por el proyecto de King, atraída por el énfasis que ponía en los chicos jóvenes, colectivo con especiales problemas en esta comunidad. También a las autoridades educativas les gustó el proyecto, que cuenta con el aval de la Universidad de Chicago y la Universidad Northwestern.