Seis programas de formación de jóvenes de la Unión Europea (Erasmus, Lingua, Comett, Petra, Force y Eurotecnet) concluyen en diciembre de este año. Para renovarlos, los pasados 21 y 22 de junio los consejos de ministros de Educación y de Asuntos Sociales de la UE adoptaron los nuevos programas -Sócrates para la enseñanza y Leonardo para la formación profesional- que entrarán en vigor el 1 de enero de 1995.
Los nuevos sistemas son válidos por cinco años y conservan los objetivos de los anteriores: la movilidad de los estudiantes (Erasmus), el aprendizaje de lenguas (Lingua), la cooperación entre universidades y empresas (Comett), la formación profesional y tecnológica inicial de jóvenes (Petra), la formación profesional continua (Force) y la promoción de la innovación (Eurotecnet). Además, la Comisión -junto con la aprobación del Parlamento y los ministros- han decidido favorecer también las iniciativas lingüísticas y culturales, que, desde la escuela o la universidad, «contribuyan a reforzar el sentimiento de pertenencia a la Unión Europea». Los créditos previstos son 574,3 millones de ecus para la enseñanza superior, 197,2 millones para las escuelas y 234,1 millones para las lenguas y la enseñanza a distancia. En total, unos 1.000 millones de ecus para el programa Sócrates y 800 millones para Leonardo (unos 1.200 y 960 millones de dólares, respectivamente).
Estas sumas pueden parecer elevadas, pero en realidad están muy lejos de lo que la UE invierte en agricultura o en pesca: la partida de Educación sólo es el 0,4% del presupuesto de la Unión.
El programa Sócrates englobará el actual programa Erasmus y una parte del Lingua, pero en lugar de afecar sólo a los estudiantes universitarios, se dirigirá también a los escolares, e incluirá tres áreas. La primera es similar a Erasmus: becas a estudiantes y profesores de enseñanza superior para realizar una parte de sus estudios en un Estado europeo distinto del de origen.
El segundo objetivo incumbe a la enseñanza primaria y secundaria: se trata de «animar a la constitución de asociaciones entre instituciones escolares de los diferentes Estados miembros para la realización conjunta de proyectos educativos, principalmente en el terreno de las lenguas, del patrimonio cultural, de la protección del medio ambiente».
El tercer aspecto se resume en promover el conocimiento de las lenguas de la Unión. Facilitará principalmente a futuros profesores de idiomas realizar periodos de inmersión lingüística o trabajar como ayudantes en el extranjero. El programa Leonardo se destina a la formación profesional. Agrupará los actuales programas Petra, Comett, Force y Eurotecnet. Su objetivo es mejorar la calidad de la formación profesional e introducir más innovaciones. Pero básicamente coordinará las mismas acciones de los programas que sustituye: financiará proyectos piloto transnacionales, intercambios de jóvenes de formación profesional o de personas responsables de los programas de formación, etc.