Con un estilo conciso y poético, la autora describe las duras y difíciles vidas de sus abuelos, que emigraron desde India a Isla Mauricio para trabajar en las plantaciones de azúcar.
El joven cineasta, descendiente de un miembro de la élite gobernante cubana, cuenta cómo pasó de la fascinación por Castro a sufrir amenazas por su oposición al régimen.