Las elecciones presidenciales de 2012 marcan un hito para el movimiento gay. Por primera vez se rompe la regla que se había cumplido hasta ahora en EE.UU.: cuando se sometía a referéndum, el matrimonio homosexual perdía. En cambio, esta vez, los votantes de Maine, Maryland y Washington lo han aprobado con mayorías muy ajustadas (53, 52 y 52%, respectivamente). Además, Minnesota ha rechazado una enmienda constitucional que quería definir el matrimonio solo como la unión de hombre y mujer. Hasta
Suscripción
Contenido Oculto
Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.
AccederSuscripción