La revolución tecnológica y la consolidación de plataformas han generado un pánico lógico ante la huida masiva de espectadores de la gran pantalla a las salas de estar. Sin embargo, el cine sigue sorprendiendo con nuevos enfoques y recursos narrativos que desmienten que el séptimo arte se bajó del tren a finales del siglo XX.
Si en los inicios del cine hubo que inventar un lenguaje de la mano de Chaplin, Keaton, Griffith, Murnau o Eisenstein, los primeros años del siglo XXI no han necesitado ser tan revolucionarios. Pero los grandes cineastas actuales han sabido echar mano de la herencia de los clásicos para aprovechar mejor los avances de una tecnología que permite casi todo. En esta selección no aparecen todos los títulos que deberían est…
Contenido para suscriptores
Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.
Léelo accediendo durante 15 días gratis a Aceprensa.