Ante la votación en California de la propuesta que permitiría la legalización de la marihuana, varios líderes latinoamericanos advierten del peligro que supondría para sus países la aprobación de esta iniciativa.

Con el número de muertos en ascenso y las instituciones bajo la amenaza permanente de las mafias del narcotráfico, mucha gente en Latinoamérica está convencida de que el “sí” a la Propuesta 19 que se votará el próximo 2 de noviembre en California debilitaría su lucha por erradicar el crimen organizado y detener la producción y distribución de droga a Estados Unidos. La polémica está servida también en México y en el continente sudamericano. Unos piensan que la legalización sería un golpe para los traficantes de drogas porque se les robaría un mercado muy lucrativo, mientras que otros consideran que apenas tendrá impacto en su negocio y sin embargo podría incrementar la demanda y las ventas por parte de grupos ilegales. Balas en un lado y fiestas en el otro Javier Oliva Posada, experto en drogas de la Universidad Autónoma de México, explica que “es difícil calcular cómo podría afectar la legalización al mercado de marihuana internacional y a la estrategia de lucha contra el crimen organizado, pero las implicaciones morales en México son evidentes, especialmente si no se tiene en cuenta el enfoque regional” “Desde el punto de vista de las autoridades mexicanas se incrementaría el número de muertes así como las denuncias por abuso contra los derechos humanos mientras que -según Oliva- en el otro lado de la frontera se consumiría marihuana por diversión. Para este lado de la frontera quedarían reservadas las balas y para el otro las fiestas”. Las declaraciones de los políticos latinoamericanos se hicieron públicas en el marco de un Congreso en Cartagena, Colombia, en el que los líderes expresaron su inquietud por el contenido de la Propuesta 19 y urgieron a los países a llegar a un acuerdo para unificar posturas sobre la política antidroga. “Resulta desconcertante para nuestra gente ver cómo, mientras aquí perdemos vidas e invertimos recursos en la lucha contra el tráfico de drogas, en los países consumidores se impulsan iniciativas como el referéndum de California”, explicó durante su discurso el Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos. En México, más de 28.000 personas han perdido la vida por la violencia relacionada con las drogas, desde que el Felipe Calderón se hiciera cargo de la presidencia y enviara a los militares a luchar contra el crimen organizado en diciembre de 2006. Esta estrategia militar fue elogiada tanto por la Administración de Bush como por la de Obama. Calderón, que durante mucho tiempo fue acusado de no hacer lo bastante como para acabar con la demanda de drogas ilegales, tachó de inconsistente la iniciativa californiana en una entrevista concedida a Associated Press. “Han ejercido presión y han demandado durante décadas a México y a otros países mayor control y lucha contra el tráfico de drogas, pero no se percibe ningún esfuerzo de reducción del consumo en Estados Unidos” ¿Es hora de cambiar de estrategia? Por su parte, las autoridades norteamericanas reconocen la repercusión que tiene en otros países el resultado de la votación de esta iniciativa en California. Mientras que algunos Estados han aprobado el uso medicinal de la marihuana, la Propuesta 19 permitiría a los adultos mayores de 21 años tener en su posesión hasta 28 gramos de marihuana e incluso cultivar la planta en una propiedad privada. La ciudad y el gobierno del Condado tendrían el poder de decidir sobre las ventas y los impuestos. La crítica expresada el lunes pasado por los gobernantes desde Colombia contrasta con un movimiento paralelo que promueve la liberalización del mercado de la droga en Latinoamérica. El año pasado tres ex presidentes latinoamericanos -de México, Brasil y Colombia- adujeron que la estrategia de la prohibición había fallado, porque el consumo de drogas y la violencia siguen aumentando, y se pronunciaron a favor de la legalización. Abrumado por la violencia, México también ha empezado a debatir sobre la posibilidad de suavizar la prohibición. El año pasado el país centroamericano despenalizó la posesión de pequeñas cantidades de droga, pero todavía es ilegal vender o cultivar marihuana. Pedro Isnardo de la Cruz, experto en seguridad de la Universidad Autónoma de México, cree que su país debería modificar su estrategia y afirma que “las autoridades han condenado la Propuesta 19 porque deslegitimaría la actual campaña militar que está teniendo lugar en México y que no está teniendo éxito”.

Gobernantes latinoamericanos advierten contra la legalización de la marihuana en California

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