Considerado el padre de la novela negra japonesa, Matsumoto combina en esta obra la crítica social con el análisis psicológico de la protagonista, envuelta en una venganza.
Original novela policiaca ambientada en Japón en la que sobresalen los ingredientes costumbristas y la descripción minuciosa y detallista del proceso intelectual que siguen los detectives para descubrir al asesino.