Médicos, psicólogos y enfermeros al servicio de la CIA y del ejército estadounidense violaron sus normas deontológicas al colaborar en los interrogatorios a prisioneros en los campos habilitados en Afganistán, Iraq y Guantánamo. Es la conclusión de un informe recién publicado por el Institute on Medicine as a Profession (Universidad de Columbia) y la Open Society Foundation (iniciativa del millonario George Soros). Denuncias semejantes habían sido hecho ya por otras organizaciones, como Physicians for Human Rights o el Comité Internacional de la Cruz Roja (cfr.
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