Una de las joyas de la Edad de Oro de la novela policíaca y de misterio británica, en torno a un crimen cometido en un hospital durante la última guerra.
En la Inglaterra de principios del siglo XX, dos policías, uno provinciano y otro de Scotland Yard, investigan un accidente aéreo en el que ha fallecido un instructor de vuelo, y solucionan el caso de modo muy ocurrente.