Roma. El diálogo entre la Iglesia católica y el Islam tendrá desde ahora un cauce oficial, gracias al acuerdo suscrito entre el Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso y la Universidad Al-Azhar (El Cairo). La finalidad de este acuerdo, por el que se ha creado un comité conjunto para el diálogo, es «promover la comprensión mutua y el respeto entre católicos y musulmanes a través del intercambio de información».
Hasta ahora, los contactos entre la Santa Sede y el mundo islámico se han venido desarrollando de modo más bien esporádico, ya que la propia ideosincrasia del Islam y sus múltiples expresiones impedían la presencia de un interlocutor autorizado. La Universidad Al-Azhar, fundada hace más de mil años, es el mayor centro de estudios islámicos del mundo. En el acuerdo, la Santa Sede y Al-Azhar se comprometen a «combatir juntos contra el fanatismo religioso como expresión de exclusión y fuente de odio, violencia y terrorismo». El comité conjunto se reunirá, al menos, una vez al año.
Juan Pablo II, que recibió en audiencia a la delegación de Al-Azhar, ha definido esta colaboración como «un paso adelante en la construcción de unas relaciones cada vez más fuertes y amistosas entre cristianos y musulmanes».
Para el Papa, «el diálogo entre las dos religiones es hoy más necesario que nunca. Este diálogo necesita ser creíble y caracterizarse por el respeto, el conocimiento y la aceptación mutuas. La larga historia entre cristianos y musulmanes tiene sus luces y sombras. Permanece, sin embargo, un vínculo espiritual que nos une y que debemos reconocer y desarrollar».
Las relaciones entre cristianos y musulmanes han experimientado un sensible impulso durante el pontificado de Juan Pablo II, que ha sido el primer Papa de la historia que se ha dirigido a un auditorio exclusivamente islámico: el hecho tuvo lugar en agosto de 1985 durante su viaje a Marruecos (el auditorio estaba constituido por 50.000 jóvenes marroquíes).
Diego Contreras