Mejoran las condiciones para que el Papa vaya a Cuba

publicado
DURACIÓN LECTURA: 2min.

Dentro del habitual tira y afloja de las relaciones entre el Estado y la Iglesia católica en Cuba, los últimos meses han sido de calma, lo que allana el camino a un hipotético viaje del Papa a la isla. Por el momento, algunos interpretan como prolegómeno del viaje la visita a Cuba que hará este mes Mons. Jean Luis Tauran, responsable de relaciones internacionales del Vaticano, por invitación del ministro cubano de Relaciones Exteriores, Roberto Robaina. Por otra parte, se comenta que el Papa podría recibir a Fidel Castro cuando éste viaje a Roma, en noviembre, con motivo de una cumbre mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). No obstante -como ha declarado recientemente el arzobispo de La Habana, el cardenal Jaime Ortega (El País, Madrid, 1-X-96)-, poner una fecha al viaje es, por el momento, aventurado.

El Card. Ortega reconoce que las relaciones entre la Iglesia y el Estado en Cuba fluctúan en función de las declaraciones más o menos críticas de los obispos respecto al régimen. Pero piensa que están en camino de llegar a ser estables: «No se puede hablar todavía de una plena normalización, pero se han dado pasos positivos. Si se sigue en esta línea puede llegar a haber un verdadero diálogo Iglesia-Estado en Cuba, sin que eso signifique identidad de criterios ni acercamiento ideológico, lo cual es imposible».

El Card. Ortega no descarta que tenga lugar la entrevista de Juan Pablo II y Fidel Castro. «Si el presidente cubano va a Roma en noviembre -dice-, pudiera darse normalmente una entrevista con el Santo Padre». Pero no está del todo satisfecho con los últimos cambios introducidos por el gobierno de Castro: «Han sido mucho más notables en lo económico y mucho menos en lo político».

También parece que la religiosidad de los cubanos ha resurgido en los últimos años. Un reciente documento del partido comunista lo reflejaba con una frase significativa: «El aumento de las prácticas religiosas no constituye un problema para la Revolución».

Por otra parte, un sondeo de la filial costarricense de Gallup señaló que el 60% de los cubanos habían asistido a alguna ceremonia religiosa en los tres meses precedentes. Según el vicario general de la Iglesia católica cubana, Mons. Carlos Manuel de Céspedes, mientras en los años 60 sólo el 20% de las familias pedían funerales religiosos, en la actualidad el porcentaje es cercano al 70%, como antes de la revolución.

Contenido exclusivo para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.

Funcionalidad exclusiva para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta para poder comentar. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.