Nairobi. Desde los primeros años sesenta, Kenia, anteriormente colonia inglesa, se guiaba por una Constitución redactada como una herramienta de la preparación para la Independencia, y después de varios años de guerrilla debida principalmente a la cuestión de la tierra y la discriminación racial. El documento confería amplios poderes al presidente y a las fuerzas de seguridad. La Declaración de Derechos era muy básica pero, por ejemplo, prohibía el aborto salvo en los casos en los que la vida de la madre estuviera en grave peligro.
El nuevo texto tiene muchas ventajas con respecto al anterior: permite la transferencia de competencias y de financiación a las provincias; los pode ...
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