España
La Confederación de Madres y Padres de Alumnos (COFAPA), que agrupa asociaciones con 1,2 millones de miembros, ha publicado una nota de apoyo a la nueva regulación de la enseñanza de la religión en la escuela. En virtud de una orden ministerial del mes pasado, se implanta una asignatura común de Sociedad, Cultura y Religión, con una versión confesional y otra con contenidos de historia de las religiones. Las familias decidirán cuál de las dos cursarán sus hijos. Esta regulación, afirma la COFAPA, «es la más coherente con nuestra Constitución y totalmente respetuosa con el derecho a elegir de los padres». Añade que la clase de religión no vulnera la aconfesionalidad del Estado, cosa distinta del laicismo que prohíbe las manifestaciones religiosas en lugares públicos. Frente a quienes desean eliminar la clase de religión en la escuela pública, el comunicado comenta: «Planteamientos en los que se vincula a la escuela estatal con sistemas unitarios, laicistas y cerrados, nos parecen respetables, pero claramente trasnochados». También cuestiona la representatividad de tal postura, pues -recuerda- más del 70% de los alumnos de colegios públicos cursan la enseñanza de religión católica, por elección de las familias.